Para mejorar la alimentación en esta etapa de la vida, es clave aplicar estrategias que aseguren una nutrición adecuada.
Por Ian Falvy Bockos. 07 agosto, 2025.Abordar la nutrición en adultos mayores implica clarificar conceptos y desmontar mitos que pueden afectar su bienestar. Un error común es creer que la disminución del apetito es normal con la edad. Aunque el cuerpo experimenta cambios, una ingesta insuficiente de alimentos puede generar pérdida de peso, desnutrición y problemas de salud.
Para mejorar la alimentación en esta etapa de la vida, es clave aplicar estrategias que aseguren una nutrición adecuada. Fraccionar las comidas en varias porciones al día, revisar si algún medicamento está afectando el apetito, tratar problemas digestivos como el estreñimiento y considerar suplementos nutricionales son acciones esenciales para mantener la salud.
Uno de los problemas más frecuentes es la omisión de comidas, especialmente en la noche. Muchos adultos mayores dejan de cenar debido a la creencia errónea de que “desayunar como rey, almorzar como príncipe y cenar como mendigo” es lo ideal. Esta práctica puede reducir aún más la ingesta calórica y agravar la desnutrición.
Otro factor importante a considerar es el menor consumo de proteínas con la edad. Este nutriente es clave para preservar la masa muscular y prevenir la sarcopenia, una condición que debilita el cuerpo y aumenta el riesgo de caídas y enfermedades.
La nutrición en adultos mayores debe adaptarse a sus necesidades individuales. No se debe normalizar la baja ingesta, sino buscar soluciones que eviten la pérdida de peso y la desnutrición. Tratar enfermedades que afecten el apetito, reducir el uso innecesario de fármacos y evitar largos periodos sin comer son medidas esenciales para garantizar un envejecimiento saludable y con calidad de vida.
